jueves, 12 de noviembre de 2009

II Coloquio Regional de Estudios de Género


La Universidad Autónoma de Querétaro, a través del Programa Interdisciplinario de Estudios de Género de la Dirección de Investigación y Posgrado, tiene el honor de invitarla (o), así como a las investigadoras e investigadores de la instancia que dignamente usted representa, a participar en el II Coloquio Regional de Estudios de Género, que se organiza alrededor de los ejes: cuerpo, tráficos y poder, en los que se pretende incluir problemáticas contemporáneas en los estudios de género tales como:

Cuerpo: nuevas formas de intervención en el cuerpo y los efectos en la subjetividad y lazo social, concretamente, leyes y cuerpo, los nuevos padecimientos como anorexia y bulimia, las nuevas pandemias, las marcas en el cuerpo, la medicalización, la cirugía estética y sexual.

Tráficos: migración, trata de personas, mujeres en situación de cárcel

Poder: participación política de las mujeres, leyes y mujeres, violencia de género

El objetivo del Coloquio es realizar un balance y estado del arte sobre las investigaciones y producción regional y nacional sobre los temas mencionados, tendientes a proponer ejes teórico metodológicos de abordaje y de políticas públicas.

El evento tendrá lugar en el auditorio “Lic. Fernando Díaz Ramírez” de la Universidad Autónoma de Querétaro, los días 18 y 19 de noviembre de 2009 de 9:00 a.m. a 14:00 y de 16:00 a 20:00.

La convocatoria para presentación de trabajos, aparecerá en la página web:

http://www.uaq.mx/novedades/coloquio_regional_genero.html , mayores informes en el teléfono lada (442) 1921200, ext.3244, 6315 y 6325, genero@uaq.mx. Favor de enviar resúmenes de no más de 200 palabras con fecha límite el día 3 de noviembre y la ponencia en extenso el a más tardar el día 10, con el fin de integrar las memorias.

viernes, 6 de noviembre de 2009

Encarcelarlas

"La moral... pertenece siempre al reino de la libertad, no al del control". / Fernando Savater

Finalmente este viernes pasado fue liberada Yasuri Zac-Nicté Pool Mayorga, una joven maya de 22 años de edad encarcelada por haber sufrido un aborto involuntario. La liberación es producto del escándalo político producido por el injusto trato que se le dio. Pero el simple hecho de que se le haya mantenido en prisión durante semanas es un indicador de las consecuencias de las nuevas leyes que, con el voto de diputados locales del PAN y del PRI, se han promulgado en algunos estados para definir la vida desde el momento de la concepción. Yasuri Zac-Nicté Pool Mayorga vive con sus padres y sus dos hijos en el pueblo de Los Sabidos, una comunidad rural del municipio de Othón P. Blanco en Quintana Roo. El pasado 4 de octubre movió, junto con su hija, un ropero de un cuarto a otro. En la tarde empezó a sangrar. Ella misma no sabía por qué. Estaba embarazada, pero el esfuerzo realizado al mover el ropero le provocó un aborto involuntario. Fue trasladada de emergencia e internada en el Hospital Morelos de Chetumal el mismo 4 de octubre. Ahí, alguien denunció ante la Procuraduría local que había tenido un aborto. El 6 de octubre fue detenida y acusada de homicidio doloso calificado. Como el homicidio es un delito grave, la joven fue encarcelada antes de ser declarada culpable. En México, a diferencia de los países en que sí se respetan las garantías individuales, se aplica la presunción de culpabilidad: todos somos culpables hasta que podamos demostrar nuestra inocencia. La acusación era posible porque Quintana Roo es uno de los estados que ha definido que la vida empieza en la concepción. Esta modificación hace que cualquier aborto sea considerado un homicidio, incluso si la mujer ha sido violada o si su vida corre peligro. Como vemos en el caso de Yasuri Zac-Nicté, las mujeres pueden ser incluso encarceladas por sufrir un aborto involuntario, mientras demuestran si éste realmente fue espontáneo. Para los policías y jueces de México esta nueva legislación es una magnífica excusa para no enfrentar a los verdaderos criminales. Siempre es más fácil detener y juzgar a una mujer indígena por haber sufrido un aborto que procesar a los integrantes del crimen organizado. Hoy los policías y los jueces pueden decir que hay menos impunidad porque están encarcelando a mujeres como Yasuri Zac-Nicté. Para qué arriesgarse a detener a un violador peligroso cuando la ley permite encarcelar, sin despeinarse siquiera, a la mujer violada que ha abortado. El aborto es siempre una tragedia. Hay que tomar medidas para reducir su incidencia y la forma más eficaz es promover el conocimiento de las técnicas de anticoncepción. Pero, tristemente, los mismos grupos moralistas representados por los diputados del PAN y el PRI que han impulsado estas nuevas leyes se oponen o no se interesan en promover medidas que reduzcan el número de embarazos indeseados. Yasuri Zac-Nicté ha sido liberada por la presión política de grupos que defienden los derechos de las mujeres. Pero no podemos seguir permitiendo que estos casos se acumulen. De una vez por todas debemos echar para atrás estas leyes que sólo buscan encarcelar a mujeres que han sufrido la tragedia de decidir la terminación de su embarazo.


Sergio Sarmiento; Reforma; JAQUE MATE.

Yasuri Sac-Nicté Pool, la criminal.

El 6 de octubre Yasuri Sac-Nicté Pool Mayorga, una indígena de origen Maya de 22 años, habitante de “Los Sabidos” en el municipio de Othón P. Blanco en el estado de Quintana Roo, que tenía 7 meses de embarazo, pensó que era buena idea ayudar a mover un ropero, el esfuerzo le provocó sangrado, y luego le sobrevino el aborto.

Acudió a la clínica del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en la comunidad de Rojo Gómez, pero como no era derechohabiente, le negaron la atención, después de varias horas, sus familiares la trasladaron en una ambulancia al hospital materno infantil Morelos, en Chetumal, donde le practicaron el legrado, los mismos médicos, que están obligados legalmente, dieron parte a las autoridades, quienes interrogaron a una convaleciente Yasuri apenas unas horas después de la intervención médica.

Al día siguiente, el 7 de octubre, la muchacha fue traslada a los deparos de la procuraduría para ser interrogada nuevamente, al siguiente día fue puesta a disposición del juez. Este le levantó cargos por “Homicidio DOLOSO calificado”, y el 12 de octubre le fue dictada auto de formal prisión y recluida en el centro de readaptación social (CERESO) de Chetumal.

20sac-nictex

Yasuri se reúne con su mamá y su hija, el día que fue liberada.

Quintana-roo es de los estados mexicanos que han decretado por ley y sin la mínima evidencia, que la vida comienza en el momento de la concepción, tal como reza la biblia, y debido a esto, los abortos son considerados un homicidio. El homicidio doloso calificado en el estado de Quintana Roo, puede alcanzar hasta los 30 años de prisión, mismos con los que se vio amenazada la joven. De nuevo las autoridades se ensañan con los más débiles tratando de justificar su sueldo, es más fácil abusar de los derechos de una joven indígena de clase baja, que atrapar a los verdaderos criminales, y si se trata de una abortista, mucho mejor.

Los familiares de la joven, hicieron lo posible por buscarle un juicio justo, inclusive vendieron lo poco que tenían para contratar un abogado, que en realidad no sirvió de mucho por lo politizado del caso, ya que las órdenes de mantenerla presa venían de mas arriba… inclusive, mas arriba de la misericordia que exige el mismo librito de cuentos de donde sacaron que la vida comienza en la concepción.

El caso llegó hasta organizaciones que protegen los derechos humanos y dela mujer, y mediante presión política y de los medios se logró que el procurador de justicia del estado Bello Melchor Rodríguez se desistiera de la acción penal en su contra, argumentando la falta de DOLO; y el viernes 23 de octubre, Yasuri Sac-Nicté Pool Mayorga fue puesta en libertad. Tras una serie de irregularidades como el hecho de que el presidente estatal de la Comisión de Derechos Humanos, Armando Gaspar García Torres, no le haya sido otorgada una copia del expediente de Yasuri, ni se le haya dejado entrevistarse con ella.

“Yasuri nunca tuvo dolo para realizar esa conducta, y por eso está afuera y es un precedente de la defensa de los derechos de las mujeres de Quintana Roo, como en todo el país”.

Gabriela Rojo Castillo, abogada de Yasuri.

La reforma anti-aborto fue promovida en el estado de Quintana Roo por la Diputada priista Laura Fernández Piña, recibió el apoyo de la mayoría priista, y se aprobó en abril del 2009.

Se cuenta esto: Que el gobernador de Quintana Roo, Félix González Canto, ha hecho todo lo posible para que la Comisión Estatal de Derechos Humanos no intervenga en el caso de Yasuri Sac-Nicté Pool Mayorga, la mexicana de origen maya de 22 años que perdió a su hijo en un parto prematuro y que paga con prisión tal osadía. La Procuraduría de Justicia local la acusa de aborto, es decir, de homicidio doloso calificado, que en ese estado, gracias a las últimas reformas al Código Penal, se paga con 30 años de cárcel. Una ley que el gobernador impuso para congraciarse con su obispo. El drama de la señora Yasuri Sac-Nicté, quien tiene dos hijos pequeños, se inició en el pueblo rural de Sabidos, municipio de Othón P. Blanco. El Ministerio Público que, como en muchos estados depende del Ejecutivo, está segurísimo de que la indígena cometió homicidio. Y la Comisión de Derechos Humanos, que se supone es independiente, también: ni las manos ha metido. Lástima que el señor José Luis Soberanes, quien dirigió la Comisión Nacional de Derechos Humanos y ahora quiere ser ministro de la Supera Corte, ya no pueda intervenir. Habría reconfirmado el daño que hizo en esta materia durante sus 10 años como ombudsman, una década en la que defendió que las leyes mexicanas castiguen a las mujeres.