jueves, 29 de diciembre de 2016

De 38 semanas, exigimos 12 para decidir




Julio César Borja 
Cuando hablamos sobre aborto estamos tocando uno de los temas con más divergencia de opiniones y desencuentros. No se hacen esperar las opiniones que sostienen que el aborto “es igual a asesinato” y por ende, la mujer que ha abortado o pretende hacerlo está cometiendo una falta grave. A esta idea se le agregan prejuicios como “-si se legaliza, las mujeres jóvenes lo van a tomar como método anticonceptivo”, “-si se legaliza, las mujeres estarán aborte y aborte”. Estas ideas antiderechos de las mujeres se enmarcan en el sistema patriarcal, en el machismo imperante, muy de la mano con los dogmas de fe judeocristianos.
Nosotras estamos a favor de la pluralidad de ideas, pues creemos que la diversidad enriquece nuestro mundo. Lo que no admitimos es la imposición de creencias sobre nuestros derechos; partimos de que el respeto a la diversidad es elemental para la construcción de una sociedad más justa y equitativa. Precisamente por ello urge hablar sobre aborto, con el fin de que se construya una visión más amable, plural y sensibilizada sobre el tema, con perspectiva de género y enfoque científico y laico, dejando a un lado prejuicios y mitos que le atraviesan.
Quienes “defienden la vida desde la concepción” dicen que la vida de un ser humano comienza cuando un espermatozoide fecunda a un óvulo y que desde ese instante “hay un alma”. Por consiguiente, le dan a ese cigoto el mismo valor que una persona ya nacida. Sostienen que desde las primeras semanas de gestación el embrión tiene pulso cardiaco y que por ello ya siente dolor. Incluso difunden materiales trucados donde aseguran que los abortos se realizan con una especie de batidora, y que el feto se retuerce de dolor, dando “su último grito”.
Es respetable que quienes mantienen estos preconceptos los apliquen para sus propias vidas, pues forma parte de su concepción particular sobre lo que es vida y lo que es ser humano/a. El punto relevante es que buscan que estas concepciones religiosas tengan eco en varias instancias de injerencia pública, imponiéndose como verdades absolutas. Los dogmas de fe se convierten entonces en imperantes políticos y en estructuras de poder. Por tanto, cuando se impone una concepción de la vida pretendiendo no dar cabida a otras, esto deviene en actos violentos contra quienes no piensan igual.
Así como hay personas y grupos que están convencidos que se debe proteger al embrión o feto por encima de las mujeres (y que ellas “deben de sacrificarse”), otros grupos no estamos de acuerdo con eso; nuestra mirada sobre la vida, sobre la dignidad humana, y sobre los valores éticos son distintos y también deben ser escuchados y respetados. Es preciso recordar que vivimos en un Estado Laico, o que pretende serlo. No deben imponerse como referentes los dogmas de fe de morales particulares, pretendiéndose como explicaciones universales expresadas desde los púlpitos para legislar y garantizar (o no) los derechos humanos a su conveniencia.
Desde nuestro posicionamiento feminista, defendemos que las mujeres tienen el derecho de elegir libremente sobre sus cuerpos, y por tanto, pueden optar por interrumpir embarazos no deseados y/o forzados. Negamos que abortar sea sinónimo de irresponsabilidad, al contrario, resulta un acto responsable cuando se asumen las condiciones y circunstancias en las que se vive, reflexionando así sobre la viabilidad de continuar con un embarazo. Insistimos que el ser mujer no es sinónimo de ser madre, y que la maternidad no tiene porqué ser destino obligado para las mujeres; apostamos por maternidades gozosas y elegidas.
Cuando se impone una concepción de la vida pretendiendo no dar cabida a otras, esto deviene en actos violentos contra quienes no piensan igual
Somos afines a los argumentos que han surgido desde algunos debates bioéticos y científicos, mismos que han sido desestimados por quienes han dejado en segundo plano las circunstancias y la vida de las mujeres, protegiendo ante todo al “no nacido”: Según la Organización Mundial de la Salud, se puede nombrar como embarazo al proceso que va desde el momento en el que un ovulo fecundado se implanta en el útero (y no antes), hasta el momento del parto. Recordemos que la fecundación se lleva a cabo en las tubas uterinas (trompas de Falopio) y que el óvulo fecundado o cigoto avanza hacia el útero; muchas veces no se logra implantar en éste (ya sea naturalmente o por un método anticonceptivo) y entonces no se puede considerar a ello un embarazo. En este sentido, si una fecundación no es igual a un embarazo, entonces un cigoto no puede equipararse a una persona nacida con todos los derechos.
También se ha investigado mucho sobre cuándo un feto comienza “a sentir”. Por ejemplo, Raymundo Canales, médico cirujano por la UNAM, especialista en Ginecología y Obstetricia e integrante del Colegio de Bioética A.C, explica que el corazón se forma y comienza a funcionar desde las primeras semanas de embarazo, pero la corteza cerebral, que se encarga de que reconozcamos las sensaciones del exterior, se forma hasta la semana 18. Este dato se contrapone con la idea que el feto “sufre y siente” cuando se realiza una interrupción antes de ese periodo de tiempo.
Es urgente que se abran los espacios necesarios para que podamos ejercer nuestros derechos, como la garantía del art. 4 constitucional, incluyendo el acceso a abortos gratuitos y seguros para las mujeres, sin estigmas ni prejuicios. Pero para defender el derecho a decidir, también debemos exigir que se garantice el Estado laico.
Celebramos que existan lugares (como la Ciudad de México) donde se garantice este derecho a decidir: si una mujer elige abortar, puede acercarse a cualquier centro de salud antes de las 12 semanas de embarazo para practicárselo de forma segura. Lamentablemente, en otros lados a las mujeres no se les garantiza ese derecho fundamental, como en Querétaro, en donde sólo es legal en dos causales: si éste es espontáneo o accidental, o si hubo una violación. Cabe destacar que en nuestra entidad no se tiene la causal por riesgo de muerte o salud de la mujer.
¿Por qué trabajamos sobre el derecho a decidir? Porque nos parece injusto que en este país más de la mitad de la población (las mujeres) no pueden decidir libremente sobre sus cuerpos; porque la prohibición del aborto está fuertemente enlazada con las inequidades sociales por sexo, situación socioeconómica y origen étnico; porque ningún método anticonceptivo es absolutamente efectivo y tenemos derecho a tener prácticas sexuales consensuadas sin fines reproductivos,  porque hay violencia de género, porque no se imparte educación integral en sexualidades humanas en las currículas escolares ni en las familias.
Ante este contexto, mujeres de distintas edades, clases sociales, casadas, solteras, analfabetas o no, de zonas rurales y urbanas, son señaladas al querer interrumpir un embarazo, y están siendo forzadas a ser madres, o son criminalizadas y sometidas a procesos legales por presunción de aborto, y esas historias de injusticia social deben de conocerse y no volver a pasar. Porque de 38 semanas que dura un embarazo, exigimos 12 para decidir.

martes, 20 de diciembre de 2016

Aborto: una perspectiva desde los derechos humanos y la ética feminista



Según el artículo 4° de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, toda persona tiene derecho a decidir de manera libre, responsable e informada, sobre el número y el espaciamiento de sus hij*s. Además, el gobierno de México han firmado acuerdos y compromisos que, entre otros, buscan garantizar el derecho de las mujeres de decidir informada y libremente si quieren tener hij*s o no, su derecho a la salud y sus derechos sexuales y reproductivos. A partir de esto se insta al gobierno para que revise las leyes que penalizan el aborto y que, por lo tanto, llevan a que las mujeres recurran a abortos clandestinos e inseguros que ponen en peligro su salud y su vida. Sin embargo, en nuestro país la mayoría de los estados penalizan el aborto, por lo que el gobierno no ha cumplido estos acuerdos y compromisos, así tenemos que:
En México, a pesar de que el aborto es reconocido oficialmente como la tercera causa de muerte materna, pocas entidades federativas han revisado sus disposiciones legales en la materia. Además, las mujeres tienen en México derechos diferenciados, pues cada estado de la Republica admite unas u otras causales de no punibilidad del aborto. (GIRE. 2005. El derecho a la salud y al aborto seguro en los compromisos internacionales del gobierno de México. (Recuperado el 23 de noviembre del 2014, de http://gire.org.mx/).
En el estado de Querétaro el aborto está penalizado y es de los estados con menos causales, solamente dos según el artículo 142 del Código Penal de Querétaro:
I. Cuando sea causado por la culpa de la mujer embarazada, y
II. Cuando el embarazo sea resultado de una violación.
Sin embargo, no se tiene claridad sobre la atención que reciben las mujeres víctimas de violación cuando hay un embarazo producto de ésta, no hay datos que muestren si las autoridades informan a las mujeres sobre su derecho a interrumpir el embarazo, no existen los reglamentos o protocolos que se deben llevar a cabo para que las mujeres que lo requieren puedan acceder a este derecho, esto tiene como consecuencia que muchas de esas mujeres recurran a abortos clandestinos, a veces, en condiciones insalubres y riesgosas para su salud y su vida, que sean denunciadas y encarceladas o que acaben teniendo un* hij* que no deseaban con las implicaciones emocionales, sociales y económicas que eso conlleva.


Considero que en Querétaro hay una relación muy estrecha entre su sociedad conservadora y lo restrictivas que son sus leyes en cuanto al tema del aborto, de este conservadurismo basado en creencias religiosas y de los valores que emanan de él, se tiene como consecuencia que Querétaro sea uno de los estados en los cuales, a partir de la despenalización del aborto en el Distrito Federal, se modificaran las constituciones estatales con el fin de proteger al óvulo fecundado y brindarle el estatuto de persona nacida con todos sus derechos desde el momento de la “concepción”.
Es de gran importancia que quienes hacen las leyes en el estado dejen de lado sus creencias personales y desde el estado laico legislen garantizando los derechos de todas las mujeres, la utopía es que se llegue a despenalizar el aborto en Querétaro, lo cual, creo improbable a corto plazo; sin embargo, se debe luchar para que, por lo menos, se amplíen las causales existentes en el estado: particularmente debería no ser punible el aborto cuando la mujer corra peligro de muerte, ya que se violentan sus derechos sexuales y reproductivos, específicamente el derecho de las mujeres a la salud.
Ampliar causales o despenalizar el aborto no significa que todas las mujeres embarazadas vayan a interrumpir su embarazo, lo que está en juego es la autonomía y el poder de decisión de cada mujer, habrá algunas mujeres que, por las razones que sean decidan abortar el producto de un embarazo no deseado, y otras que se reconcilien con ese embarazo, éste se vuelva deseado y decidan continuarlo. Cuando no se garantiza el derecho de las mujeres de decidir sobre su maternidad se coarta uno de  los principios fundamentales de la ética, la autonomía; además, cuando una mujer decide abortar lo va a hacer sea legal o no, el problema es que mientras las mujeres que tienen dinero viajan a otros lugares para realizarse un procedimiento ilegal pero seguro para su salud y su vida, las mujeres de bajos recursos económicos buscarán otras formas menos seguras para su salud y sus vidas, lo que lleva a una situación de desigualdad e injusticia social; así, se les restringe a estas mujeres otro de los principios de la ética, la justica.
Según Gustavo Ortíz Millan, penalizar el aborto es incorrecto moralmente porque violenta los derechos básicos de las mujeres(1).
Considero esencial que las personas que participan en la realización de leyes desde los distintos órdenes de gobierno dejen de lado sus creencias y valores personales, tienen el derecho de creer y de pensar como quieran, pero a la hora de hacer leyes, éstas deben garantizar el respeto a los derechos fundamentales y basarse en el respeto a los principios éticos de autonomía y justicia para todas las ciudadanas y todos los ciudadanos que habitamos en el país, el estado falla cuando esto no se cumple y esto provoca inequidades y desigualdades sociales.
Para lograr que se avance en las leyes y se respeten los derechos humanos de todos y todas, muchas personas se organizan ya sea a través de asociaciones civiles y/o tejiendo redes con otras personas para luchar y exigir al estado el cumplimiento de las leyes contenidas en la Constitución Mexicana y los compromisos internacionales adquiridos por el gobierno con respecto al tema de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres, considero que desde la sociedad civil es como se puede ejercer presión a las autoridades para que se avance en este tema.
Más información, ddeserqueretaro@gmail.com y en : GIRE. Octubre2014. Perfil de las usuarias que han realizado interrupción legal del embarazo en la ciudad de México. Recuperado el 23 de noviembre del 2014, de http://gire.org.mx/ Ω
Referencias
(1) Gustavo Ortíz Millan. Ética femenina, ética feminista y aborto. Recuperado el 26 de noviembre, de http://www.debatefeminista.com/




Por qué grita esa mujer...



¿por qué grita esa mujer?

¿por qué grita?
¿por qué grita esa mujer?
andá a saber 


esa mujer ¿por qué grita?
andá a saber

mirá que flores bonitas
¿por qué grita?
jacintos margaritas
¿por qué?
¿por qué qué?
¿por qué grita esa mujer?


¿y esa mujer?

¿y esa mujer?
vaya a saber
estará loca esa mujer
mirá mirá los espejitos
¿será por su corcel?
andá a saber


¿y dónde oíste 

la palabra corcel?
es un secreto esa mujer
¿por qué grita?
mirá las margaritas
la mujer
espejitos
pajaritas
que no cantan
¿por qué grita?
que no vuelan
¿por qué grita?
que no estorban
la mujer
y esa mujer
¿y estaba loca mujer?


Ya no grita


(¿te acordás de esa mujer?)



Susana Thénon 

martes, 22 de noviembre de 2016

Mi cuerpo es mio

                                        mio

                                                 mio
                                                                 y de nadie mas!





Ilustración tomada de MARICARMEN

https://www.facebook.com/maricarmenzine/

Rebeca Lane - Bandera Negra



Hoy día de la musica y del músico...

mas música feminista para su selecto acervo


lunes, 21 de noviembre de 2016

Encuentros en torno al aborto



Alejandra Rodríguez 
El tema no nos es ajeno, todas conocemos historias de mujeres en esta situación. Unas en condiciones más terribles que otras, con mayor riesgo y abandono. El tema de aborto es un tema de mujeres en situaciones particulares, de historias reales, de mujeres de carne y hueso con anhelos, planes, sueños. Es decir, tenemos que ver las situaciones en las que las mujeres deciden interrumpir un embarazo, posponer su maternidad. (1)
Lo cierto es que las mujeres posponen sus embarazos para un tiempo mejor, porque tienen planes es sus vidas y las maternidades no son un tema menor y las mujeres lo sabemos.
Todas las personas tenemos una opinión sobre el aborto
Pero a pesar de lo anterior, la opinión entorno al aborto nos tiene divididas: las personas “antiderechos” y las “prochoice”. Es claro, las primeras criminalizan y persiguen a las mujeres que decidan interrumpir su embarazo y las segundas, creemos firmemente en que las mujeres tienen derecho a decidir el momento para ser madre o no.
La cosa es que no creo que tengamos tantas diferencias, creo muy en el fondo coincidimos, es decir, yo creo que los legisladores, médicos, dirigentes de parroquias,  y las que defendemos la decisión de las mujeres sobre su maternidad queremos lo mismo: maternidades placenteras para las mujeres, hijos e hijas amadas,  deseados, queridos, anhelados. Lo que no estoy segura es que sepan que nosotras, quienes apoyamos el derecho a decidir, formamos parte de ese proyecto, a través de el dialogo constante con las mujeres, con chavos y chavas, difundimos información preventiva, vamos a las escuelas, que si el taller de métodos antifecundativos, que si el de prevención de Infecciones de ITS(2)  y VIH(3) , que si el de no violencia en el noviazgo, que hay que ahora el taller de plan de vida. Nosotras participamos para que aquellas maternidades soñadas sucedan.
El aborto como un tema de clase social
Casi siempre que se habla de aborto, se inicia con frases como “es un tema complicado” la verdad creo que no, creo que es sencillo, las mujeres saben cual es el mejor momento para ser madres, lo más complicado es el escarnio social, la criminalización de las mujeres, el señalamiento y la doble moral que apunta a las mujeres como culpables, cuando el acceso acceso a una vida digna no la están propiciando los gobiernos. Donde son las mujeres pobres las que se llevan la peor parte, el tema de aborto se convierte así en un tema de acceso de justicia hacia las mujeres pobres. Mujeres que no pueden pagar un servicio privado, tomar un vuelo a Houston e interrumpir su embarazo en clínicas seguras. Una mujer de clase baja, o una mujer pobre expone su vida llevando a cabo abortos clandestinos, de alto riesgo y en abandono. Como ven, el costo personal es muy alto.
Y vienen las preguntas, ¿es enserio que quieren maternidades forzadas? ¿en serio quieren obligar a las mujeres de nuestras comunidades a seguir con embarazos productos de violaciones?  ¿de verdad pensamos con compasión cuando votan por leyes que castigan a las mujeres que deciden posponer una maternidad, para un tiempo mejor? ¿es parte de su proyecto social juzgar a una mujer por decidir interrumpir un embarazo porque esta en riesgo su vida y su salud?
El derecho que tiene una mujer de decidir cuando ser madre está fundamentado en la propia constitución mexicana. Y ojo, es bien sabido que en casi todo el mundo se considera un crimen obligar a una mujer a proseguir un embarazo producto de una relación sexual que violentó su autonomía reproductiva. Tan es así que el embarazo forzado se define como crimen de lesa humanidad.
¿Qué queremos? / Tomen nota:
Ahora, después de estas reflexiones, preguntas al aire y pedradas directas, se preguntarán qué queremos las “prochoice” finalmente pues. Sencillito: queremos la despenalización del aborto, pa’ más clarito; en Querétaro queremos que el estado garantice el acceso legal de las mujeres a una interrupción del embarazo seguro y gratuito. La ampliación de causales; queremos la causal Salud,  por lo menos, ¡caray!, es decir que una mujer tenga la opción de interrumpir su embarazo sí su vida, salud y bienestar corren peligro.
Y finalmente, para usted hombre, ciudadano de a pie, queremos que sea cómplice de la felicidad de las mujeres y de las maternidades placenteras, y para esto le doy dos tips:
El primero es reconocer enteramente que las mujeres que deciden interrumpir un embarazo son personas con dignidad y derechos humanos, no criminales, y tienen derecho a decidir sobre sus cuerpos y sus vidas y el segundo es que se comprometan con los cuidados, es decir, que sean más justos y éticos con las personas que dicen amar. Ω
Referencias
1. En el Estatuto de Corte Penal Internacional suscrito por mas de 60 países entre ellos México.
2. Infecciones de transmisión sexual.
3. Virus de la Inmunodeficiencia Humana.
Bibliografía:
• “Sí es mi embarazo pero no es mi cuerpo”
HERNÁNDEZ GONZÁLEZ, Héctor Alexis Decidir (México); Balance (México) 2010
• Paulina, justicia por la vía internacional © 2008 Grupo de Información en Reproducción Elegida, A.C.
Fb: /DdeserJovenesQro
Tw: @DdeserQro

Mi vida, mi cuerpo, mis decisiones

Abortar  también es un decisión responsable

miércoles, 2 de noviembre de 2016

Nuestros cuerpos son un campo de batalla
Por Donna R. Oliveros

El 28 de septiembre no es sólo una fecha más es un símbolo que encarna las diferentes luchas por el derecho a decidir, principio fundamental de los movimientos feministas que persiguen la autonomía de las mujeres sobre sus cuerpos y sus vidas, porque “lo personal es político”.
La historia de la efigie nos remonta al 28 de septiembre de 1888, cuando en Brasil se decretó que los(as) hijos(as) de las mujeres esclavas nacerían libres. Antes de la aplicación de este principio jurídico, la descendencia de una esclava pasaba a ser propiedad del esclavista al nacer. El “Día de los Vientres Libres” fue re-significado posteriormente en noviembre de 1990, en el V Encuentro Feminista Latinoamericano y del Caribe organizado en Argentina —con la asistencia de mujeres procedentes de Colombia, El Salvador, Bolivia, Brasil, Ecuador, Chile, Guatemala, Nicaragua, Paraguay, Perú y México— para dar lugar a la campaña que tiene como norte: visibilizar, denunciar y exigir que existan se cumplan y/o se amplíen las leyes que permiten el aborto en algunos lugares.  No obstante, la desigualdad y la marginación social de las mujeres no se acota a límites geográficos, por ello, más países de otras regiones del mundo se han ido sumando a la campaña. Actualmente, en un contexto en donde se practican 55 mil abortos inseguros al día, en el mundo, y de los cuales 95% corresponden a países en vías de desarrollo, se conmemora “el Día de Acción Global por un Aborto Legal y Seguro”. 
El hecho de que de cada ocho muertes maternas una sea consecuencia de un aborto inducido en condiciones inseguras, nos habla de un problema de salud pública. Y en tanto esto, los gobiernos tienen la responsabilidad de crear las condiciones jurídicas e institucionales respectivas para disminuir el índice de morbilidad y mortalidad de las mujeres.
México
México tiene una población de 122.3 millones de personas de las cuales el 51.1% son mujeres. Pese a que representan más de la mitad de la población, se siguen negando y no garantizando sus derechos empezando por los derechos a la vida, a la salud y a la autonomía sobre el primer territorio: el cuerpo.
Cada año en nuestro país hay más de un millón de abortos (Excelsior, 2013), la mayoría realizados en un contexto de clandestinidad debido a las restricciones normativas sobre el aborto en  cada estado. Sólo en la Ciudad de México, las mujeres pueden abortar hasta las 12 semanas: De 2007 a 2015 en los servicios públicos capitalinos se han interrumpido legalmente 138 mil 792 embarazos (Excelsior, 2015).
Aun cuando el derecho a la salud y el derecho a decidir de manera libre, responsable e informada sobre el número y el espaciamiento de los hijos, se encuentran incluidos en el artículo 4º de la Constitución Mexicana, y pese a que México ha firmado tratados internacionales en materia de derechos humanos —como en la Convención sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW)—, en nuestro país los funcionarios, los religiosos y los fundamentalistas —la mayoría hombres— siguen coartando la libertad de las mujeres a ejercer de manera libre e informada, su ciudadanía. Se persigue a través de la ley y el dogma a las mujeres que deciden sobre sus cuerpos y a las(los) activistas que promueven las maternidades libres, informadas y voluntarias; la información laica y gratuita sobre métodos anti-fecundativos y la autonomía de los cuerpos.
Querétaro
En cuanto a las regulaciones sobre el aborto en los diferentes estados de México, nos encontramos ante un panorama muy desigual. Sólo en la ciudad de México está permitido el aborto por voluntad de la mujer, hasta las doce semanas de gestación. Los demás estados lo permiten sólo bajo ciertas causales entre ellas: por peligro de muerte o afectaciones a la salud de la mujer; alteraciones genéticas o congénitas en el producto; inseminación artificial no consentida; por causas económicas o cuando el aborto es por causa de un accidente. Sólo la violación como causal se encuentra en todos los Códigos Penales de las 32 entidades federativas.  No obstante, (…) el acceso efectivo de las mujeres a las causales legales de aborto es bastante precario o nulo, lo cual denota una gran brecha entre la ley y el ejercicio efectivo de este derecho” (GIRE, 2008). En otras palabras, aunque las causales existan, pocos son los esfuerzos por parte de las instituciones responsables de difundir la información acerca de la existencia de éstas,  y de llevar a cabo los procedimientos y los lineamientos requeridos para la interrupción de un embarazo cuando sea producto de una violación sexual.
En el caso de Querétaro, el aborto no es criminalizado si el embarazo es producto de una violación o si el aborto es consecuencia de un accidente (Art. 142). No obstante, pese a las restricciones normativas en la entidad, las mujeres queretanas siguen decidiendo sobre sus cuerpos. Del total de ILE (Interrupción Legal del Embarazo) realizadas en la Ciudad de México después de su legalización, del 24 de abril del 2007 al 2010, se realizaron 34, 351 interrupciones, de las cuales el 2.7% corresponde a residentes de otros estados (944 mujeres).  De ese total, 88 mujeres eran residentes de Querétaro (El Universal, 2010).
Sólo las mujeres con ciertas características socioeconómicas y con la información adecuada han podido trasladarse a la Ciudad de México para la ILE, mientras las demás han tenido que practicarse un aborto clandestino, con todos los riesgos legales y a la salud que eso conlleva. En este sentido, podríamos hablar de que la normatividad sobre el aborto en Querétaro y de las demás entidades federativas, están revestidas de injusticia social.
Hay que señalar que las restricciones normativas en materia de aborto, significan una violación a los derechos humanos de las mujeres. El estado tiene la obligación de garantizar el derecho a la salud reproductiva; recordemos que los derechos reproductivos son derechos humanos.
Por lo aquí vertido, y debido a que se trata de una situación generalizada en el mundo, es que la campaña del Día de Acción Global por un Aborto Legal y Seguro busca: ampliar la información y la educación sobre sexualidad; defender que la sexualidad es parte constitutiva e indisociable de nuestra identidad;  difundir las consecuencias del aborto inseguro en la vida de las mujeres; establecer coaliciones dentro del movimiento de mujeres, con los gremios médicos, jurídicos y otros para realizar campañas informativas y educativas a favor de políticas y leyes que garanticen el derecho a decidir cuántos hijos/as se quiere tener y la atención humanizada del aborto (Mujeres en Red, 2005). Ω
Referencias
El Universal. (2011). 106 mujeres acuden al DF para abortar. Recurso electrónico. Recuperado de: http://archivo.eluniversal.com.mx/notas/796607.html
GIRE. (2008). Cifras del Aborto en México. Recurso electrónico. Recuperado en: https://www.gire.org.mx/publicaciones/hojas-informativas/cifrasact08.pdf
Excelsior. (2015). Se han interrumpido legalmente 138 mil embarazos en ocho años. Recurso electrónico. Recuperado en: http://www.excelsior.com.mx/comunidad/2015/04/23/1020405
Excelsior. (2013). En México hay más de un millón de abortos al año. Recurso electrónico. Recuperado en: http://www.excelsior.com.mx/nacional/2013/11/05/926942
Mujeres en Red. (2005). 28 de septiembre: Día de Acción Global por un Aborto Legal, Seguro y Gratuito. Recurso electrónico. Recuperado en: http://www.mujeresenred.net/spip.php?article179
GIRE. (2015). Niñas y mujeres sin justicia. Recurso electrónico. Recuperado en: https://www.gire.org.mx/publicaciones/hojas-informativas/camp28sep.pdf